El 3 de marzo de 2024, Amon Solar en San José, Costa Rica, fue testigo de una explosión de energía y pasión al hardcore desatada por la productora Destiny Recordings. En un evento que marcó el regreso a Costa Rica después de 16 años, la banda de hardcore de Winnipeg, Manitoba, ¡Comeback Kid!, hizo temblar los cimientos de la ciudad con una noche cargada de intensidad y emoción.

El telón se levantó con la presencia de cuatro bandas teloneras, aunque este término resultó ser subestimado dada la fuerza y el fervor que cada una desencadenó sobre el escenario. Desde Estados Unidos, Powerplay abrió la velada con una actuación imponente, seguida de Wise Up, debutando en una noche que prometía dejar huella, con miembros de la brutal banda Billy The Kid. Living End, también debutando, aportó una dosis adicional de metal/hardcore que hizo estremecer al público. Y, desde El Salvador, Toma el Riesgo, con su brutal Straight Edge Hardcore, cerró el ciclo de teloneros dejando a la audiencia en un estado de euforia extrema.

Con la escena perfectamente preparada, el plato principal, Comeback Kid, no decepcionó en nada. Desde el primer acorde hasta el último rugido, la banda se entregó por completo y arrastró consigo a una multitud enloquecida. El lugar se convirtió en un caos controlado, con gente coreando las canciones, saltando, lanzándose desde la tarima una y otra vez en un torrente de emociones desbordantes.

Lo que se presenció esa noche fue más que un concierto; fue una conexión visceral entre la banda y sus seguidores, almas unidas por la música y la energía desenfrenada del buen hardcore. Destiny Recordings una vez más demostró su capacidad para sacudir la escena underground en Costa Rica y dejar una marca indeleble en la memoria de todos los presentes.